Iglesia siempre: ¡gracias, Plasencia!

Iglesia siempre: ¡gracias, Plasencia!

San Pablo podría haber escrito una carta a los placentinos, y habría empezado como la primera carta a los tesalonicenses: “gracias a Dios por vosotros, por la actividad de vuestra fe, el esfuerzo de vuestro amor y la firmeza de vuestra esperanza en Jesucristo nuestro Señor…”

He ahí una Iglesia, la comunidad en Plasencia de los que siguen a Jesús, unida por ese mismo Jesús a la misma Iglesia de Cuenca que va a anunciar el Evangelio con la fuerza que sólo el Espíritu Santo da…

Porque en la economía de Dios, “al que tiene, se le dará” y nos traemos más de lo que os dejamos… Os dejamos emociones y nos traemos testimonios vivos; os dejamos belleza y nos traemos admiración por vuestras catedrales; os dejamos música y nos traemos la armonía de ser un sólo discipulado de Cristo…

Los detalles en la acogida, las sonrisas de vuestro servicio, tantos grupos (scout, juventud, parroquias, colegios…) aunando esfuerzos, un obispo que recoge los platos (los suyos y los de los otros…) ¿Por dónde empezar a dar(os) las gracias?

Llevamos un musical y nos trajimos una Iglesia viva, una comunión en un mismo Espíritu. Gracias. 

Con san Pablo os decimos que “sabéis muy bien que nuestra visita no fue inútil” y que el deseo de volver a encontrarnos y hablar de Carlo se ha acrecentado. Carlo, ese santo que nos atrae para Jesús y que amaba tanto a la Iglesia (“criticar a la Iglesia es criticarnos a nosotros mismos”) nos ha enseñado por vosotros el don que significa ser uno en Jesús. 

De nuevo, ¡gracias! 

Y también ¡hasta pronto!

Torrevieja… ¡con el obispo Munilla!

Torrevieja… ¡con el obispo Munilla!

Torrevieja y su auditorio municipal nos esperaban –cómo no– en agosto… En realidad, el mar, casi al lado, no fue nuestro  destino. D. José Ignacio Munilla y sus feligreses, tras una semana de A.J.Week, misión joven por las playas de Santa Pola, Benidorm… cerraban la actividad pastoral con nuestro musical, otro modo de nueva evangelización. Fieles al mensaje de Jesús predicado con nuevos estilos, Original, el paso de Carlo y la diócesis de Orihuela-Alicante compartimos unas horas de tiempo de Gracia, en el que Dios tocó nuestros corazones. ¡Gracias a Mons. Munilla por su agradecimiento, por destacar que somos Iglesia de arrimar el hombro y por haber tomado nota de tantos detalles de la obra…!

Entre molinos… ¡Mota del Cuervo!

Entre molinos… ¡Mota del Cuervo!

Mota del Cuervo, en nuestra provincia, no se dejó ganar en generosidad. Con su auditorio lleno para las dos sesiones (excepto los afectados por una nevada imprevista y enorme… aún no controlamos el tiempo atmosférico…) tuvo por unas horas a Carlo vivo y dicharachero y el público aplaudió con alegría, encendió las linternas de los móviles al ritmo de la canción final y nos arropó antes y después de las funciones, buscando incluso refugio por si la nevada nos impedía volver en autobús esa noche. ¡Gracias a su párroco, D. Jesús, por velar por nosotros!

¡Gracias, Toledo!

¡Gracias, Toledo!

Toledo. Palacio de Congresos. Mil butacas. La archidiócesis de Toledo, como cierre de sus Jornadas de Pastoral, se atrevió a dar el paso… Una respuesta extraordinaria: dos llenos absolutos y la cercanía de D. Francisco Cerro, su arzobispo, que rezó con nosotros antes de la sesión y nos dio palabras de ánimo y reconocimiento al finalizar. Toledo, como no podía ser menos, se entusiasmó con Carlo y su amor por la Eucaristía, con su celo por evangelizar… Se volcaron en atenciones con nosotros y disfrutaron de Carlo con nosotros también… ¡Gracias por ser los primeros de la gira!

Nuestra primera salida… Tarancón

Nuestra primera salida… Tarancón

Tarancón tenía que ser, por derecho propio, nuestro segundo estreno porque casi un 25% del equipo llevaban varios meses de desplazamientos para ensayos de escena y de orquesta. Sin ellos, el musical no habría salido adelante, y se habían ganado representar en su localidad. ¡Impresionante acogida! El auditorio lleno y testimonios estremecedores. ¡Gracias por compartir con nosotros cómo el musical tocó vuestros corazones y vuestras vidas! En Tarancón comenzamos a ver, como un regalo de Dios, algunos frutos del musical: el consuelo en la pérdida de un familiar, en la propia enfermedad, la ilusión por decir sí a Jesús en la vocación… ¡Gracias, siempre!

¡Estreno en Cuenca!

¡Estreno en Cuenca!

Las expectativas en nuestra pequeña ciudad por todo lo alto, tras nueve meses de ensayos y un elenco de casi cien actores y actrices… Al mismo tiempo, sin embargo, un ambiente que invitaba a disfrutar de encontrarnos con Carlo y con Jesús, de unir en un musical lo bello y lo bueno de ser católicos. Las entradas de las tres sesiones se agotaron a los pocos días de venta (¡Vale! …quizá las familias de los 140 que somos ya casi llenaron un pase… pero, ¿y los otros dos?) y el público salió sorprendido de la calidad actoral, de la música en directo y de los decorados, de las coreografías… del nivel casi profesional y de la dosis de realidad que se vivía sobre el escenario. Porque eso fue lo que más destacó el público: la verdad de lo que representábamos sobre las tablas… ¡Porque era vida lo que se veía! Felices empezamos nuestra gira con tantísimo apoyo…