Bueno, sólo quiero deciros que a mí el musical me ha dado respuestas, me ha hecho ver mi llamada mucho más clara. Me ha tocado el corazón de una manera que nunca en mi vida pensé que lo haría… No sabía que se podía tener una experiencia tan grande de Dios y tan intensa. Cuando sales, ves que todo tiene significado, entiendes todo y le das sentido, te cambia toda la perspectiva. Y, bueno, lo de llorar… no paré de llorar ni un segundo en toda la obra, pero en la segunda parte, Dios decidió que era hora de darme cuenta de mi llamada y ahí fue cuando lloré desconsoladamente. También es muy bonito ver lo mucho que nos desea Dios y lo mucho que espera el día en el que nos encontramos con Él.
¡¡¡Sois muy grandes!!!